La innovación y su rol en la viabilidad y escalabilidad de las empresas

La innovación, muchas veces mal entendida y otra veces infravalorada, es una herramienta crucial para cualquier empresa.

La escalabilidad de una empresa depende de muchos factores que están entrelazados entre sí, y por eso es fundamental la visión global de la persona con el rol de CEO, que se asegure que toda la empresa progresa en bloque y armonía hacia la búsqueda de esa escalabilidad. 

Uno de esos factores es la innovación, crucial tanto al iniciar un nuevo negocio, como durante toda su existencia como iniciativa empresarial. 

Vamos a sentar las bases primero, y definamos qué entendemos en Tu CEO Copiloto por innovación, ya que esta es una palabra que se utiliza mucho, con interpretaciones muy diferentes entre diversas personas.

En algunos casos, cuando hablamos de innovación pensamos en cosas que cambian por completo la forma de comportarse de la sociedad, por ejemplo la imprenta, la máquina de vapor, internet o los smartphones; y efectivamente esto es innovación, aunque no es la única forma de innovación, y esto es importante tenerlo en cuenta.

En otros casos, pensamos que ciertos cambios en algo que ya existe es innovación, pero la realidad es que casi nunca lo es, porque de lo que estaríamos hablando sería de mejora continua, que no está mal tenerla, pero es importante diferenciarla de la innovación.

Para que un servicio, producto o proceso sea innovador, tiene que generar impacto en sus potenciales usuarios, allí está la clave. Ese impacto puede llegar a todo el planeta, como los ejemplos de gran innovación mencionados anteriormente, o puede generar impacto a un sector o a un grupo específico de consumidores. 

Muchos fundadores deciden crear empresas en sectores dónde hay una amplia previsión de crecimiento de la demanda de cierto producto o servicio, con el fin de “subirse a la ola”, sin definir claramente el factor diferencial o impacto real que les permitirá ganar cuota de mercado, es decir, esa innovación que hará que los compradores acudan a esa nueva marca, en lugar de acudir a las ya existentes. En muchos casos se centran en estudiar a la competencia, y definen pequeñas mejoras respecto a la oferta de los competidores, pero esa es una estrategia de muy poco recorrido, porque los competidores ya establecidos, tendrán a su alcance implementar esas pequeñas mejoras de manera rápida.

Guy Kawasaki, conocido experto en innovación, lo explica muy bien en este artículo llamado el arte de innovar, escrito en 2006, y muy válido aún en 2023. El primer elemento a tener en cuenta es intentar saltar hacia la siguiente curva, o incluso crear una curva nueva, esa es una de las claves. Pequeñas mejoras no me van a garantizar la viabilidad de mi empresa a futuro, y mucho menos su escalabilidad. La imagen que he elegido para este post ejemplifica muy bien este concepto.

Quiero compartir también este vídeo de Guy en TEDxBerkeley realizado en 2014, dónde aborda la misma temática, añadiendo un par de elementos, y uno de ellos me parece crucial: La búsqueda de significado, que es otra forma de decir que debemos buscar generar impacto, en contraste a buscar ganar dinero de partida. Como bien dice en su charla “...si se da el caso de que consigues cambiar el mundo, es muy probable que también consigas ganar dinero, pero si arrancamos con el único deseo de ganar dinero, es muy probable que no consigas dinero, no crearás impacto, no cambiarás el mundo y posiblemente fracasarás”. Dónde Guy dice cambiar al mundo, yo añado que esto se puede sustituir por cambiar mi ciudad, mi sector, o mi propia empresa si hablamos de innovación interna, esta última también es muy importante para la escalabilidad empresarial.

Cuando veo empresas en situaciones complicadas, que se centran en buscar culpables en su equipo comercial, la agencia de marketing o en la configuración de las campañas de google, me doy cuenta que muchas personas con el rol de CEO necesitan entender que si no generan impacto, que es parte de la estrategia empresarial base, ninguna de esas acciones tácticas van a funcionar, por muchos cambios que hagamos… así de claro.

Esta falta de generación de impacto, considero que es una de las causas que subyace en esta cifra que ya comentaba en mi primer artículo: un 90% de empresas que se crean en España no llegan a los tres años, porque veo muchos empresarios con grandes ambiciones económicas, pero con pocas posibilidades de generar impacto, en algunos casos porque simplemente renuncian a ello y buscan “pescar en río revuelto”, aunque pienso que en la mayoría de los casos si querrían generar ese impacto, pero no saben cómo hacerlo y están atrapados en el día a día intentando salvar su negocio o mantenerse en una línea continua.

Y no es solo esa generación de impacto inicial, que puede que acertemos, también tenemos que seguir trabajando en generar impacto adicional, ya sea al mismo grupo de usuarios o a otro nuevo, con el fin de ir dando saltos a nuevas curvas, o mejor aún, creando nuevas curvas que nos permitan alcanzar esa anhelada escalabilidad empresarial, y dominar en nuestro sector.